Carta reprobatoria.

La foto se trataba de una señora sosteniendo en sus brazos a un hombre. (para mas informacion de que es esta jalada, leer el post de abajo)

Según yo.

Era cerca de la madrugada, cuando Margarita Martinez la despertó un golpe seco en la puerta principal del primer piso, apurada bajo los escalones pero entonces antes de abrir la puerta pensó " ¿que tal si es un ladrón?". Ella era una mujer solitaria, después de la muerte de su esposo Federico Martinez hace 20 años solo se dedicaba a asistir a misa los domingos y hacer el quehacer en su casa. Pero de pronto ollo detrás de la gruesa puerta de roble:
- Mama.

Inmediatamente reconoció que era su hijo, como cuya loba reconoce el aullido de su pequeño lobezno, se apresuro a abrir los 4 cerrojos de la puerta. Jaime, su segundo hijo (el menor) yacía recostado a un lado de la puerta, así que al abrir la puerta la señora solo vio a su derecha una pierna, dijo una vez mas "mama" trato de levantarse pero se tropezó. Doña Margara, lo acojio en sus brazos como cuando el era mas pequeño y le cantaba para que se durmiera. Solo que esta vez, el tenia 40 años olia a alcohol barato y tenia una herida debajo del torax donde terminan las costillas. La perdida de sangre le había echo palidecer y un sudor frío lo envolví. Aunque el cuarto estaba iluminado Jaime podía ver como este se hacia cada vez mas y mas oscuro.
Su madre se quizo despegar de el un momento para alcanzar el teléfono y llamar una ambulancia. A esto Jaime la sostuvo como si su vida - que estaba por terminar- dependiera de ello, Sin palabras Margarita supo que su hijo no quería estar solo, la idea de que quizás esta era la ultima vez en que vería a su hijo con vida pasaba por su mente pero en cierta forma se negaba a aceptarlo, trato de convencerlo de que llamara a la ambulancia, pero fue en vano.

No tomo mucho tiempo para que se diera cuenta que ya no había nada que hacer, solo quedarse a su lado los últimos minutos con quien a sus ojos de madre, seguía siendo el pequeño Jaime que sacaba lombrizes del patio y asustaba a sus primas con ellas.

Casi a manera de susurros, Jaime empezó a contarle un resumen de su vida. Si los que dicen que cuando mueres pasa la vida frente a tus ojos, este caso no fue la excepción solo que en vez de guardar silencio Jaime eligió hacer un resumen de su vida. Una vida que había que lo había orillado a su situación actual. Tenia Sida.

Pero antes, llevo un recuento desde que abandono la preparatoria y de allí se dedico a labores no muy productivos, como vender tarjetas piratas de SKI etc. Las lágrimas no se hicieron esperar. Por fin llego a la parte donde hace 7 meses su esposa lo había abandonado por su mejor amigo, la decepción fue tal que termino alcoholicamente en una orgía gay. Esto sumado al echo de que la mujer de su vida estaba en brazos del hombre que alguna vez juro ser su mejor amigo, lo obligo a interceptarlos en un restaurant italiano y descargar su .45 en su amigo, la hija de su amigo, y por ultimo su esposa, este orden no fue al azar, quería ver su expresión en el rostro de ella cuando veía todo su mundo caer el sonido de las balas, al ser amateur en esto del asesinato corrió como nunca, esto lo hizo tropezarse con la mesita de un mesero que traía un cuchillo de cocina que se clavo en su vientre, 3 cuadras después se dio cuenta que estaba sangrando.

Las sirenas de la policía se oían cerca. Y las ultimas palabras que Jaime Ramón Martines fue.

Perdoname.

Ante esto su madre solo no podía dejar de pensar: " Este ni es mi hijo.."








end.